Colecciones de irreverencias de la niña Warhol o la chica Cola-Cao. Elena testada de La Mancha -Ejquilandia de España-, la motera que surgió del tostado estío del “palomaco”, en un Seiscientos, con su planta figurativa enraizada en esa postmodernidad que sólo arde ante un impoluto sentío de la relación humana: Una quijota on the rocks de rompiente lanza –entre Nina Hagen ibérica y Vigée-Lebrun casquivana en Pigalle-; o sea, una walkiria de ballesta y arco “inhiesto” de dardos esterilizados allende el bosque de San Caos…, que se reserva las corazonadas para l@s capaces de discernir entre el dulce licor de la silvestre endrina y el mortífero carmín: Pura impostura…
La chica de la “tira cómica” diaria, la reina mora del editorial demoledor a todo cuanto se menee… Azote de la vulgaridad con pose de Salomé, es una melancólica de tomo y lomo; llama purificadora e ilusa contra el aburrimiento, porque, pudiendo quemar más si cabe que todas las hogueras de los diablos, usa el retardo al deflagar… ¡Eso sí, le arden las botellas…, y son de cerveza…!
Descacharrante y certera: ¡perdiz que vuela, perdiz a la cazuela!
¡Albacete de l@s cien mil emergentes hij@s de la causa cool hispana!...
En un recóndito lugarín que apodan Golosalvo -nada lejos de la Fuentealbilla del pequeño “torpedo”- nació esta abogada de nombre Elohe “Poppy la Amazona” de pomos bien armados, erguida al cielo como una espiga de generoso grano en vara y media, de arte y lozanía. Esplendor de la Crocus amarga –el azafrán- deshojada con garbo, macerada como la tierra que pisa -calizas del Mioceno-, y sólo batida por las aspas de los molinos que ella elige, y exclusivamente en colinas de la misma altitud -700 m.- que su añorada Madrid…, adonde galopa y corta el viento (melena sic) en pro de otros esperpentos y “Líos” que enriquezcan su ya de por sí concepto del colmo… Humildemente: ¡¡ELOHE! (¡Viva Costus!)
… ¡Por sus obras la conocerás!: decires pintureros de adolescente zambullida en el ayer; adoratriz de un único becerro sin genero de dudas –el masculino-, mujer de agallas y llagas… A la lima y al limón, que sí tiene quien la quiera… ¡“Inenarreibol”!: Cipos, cuchillos, lunares, botes y capotes; vídrios, uñas, tatuajes, estigmas, mantillas y coronillas…
Del amor por lo primero… su militancia chic (“Tan importante como saber vivir es saber recordar”, como aseguran los buenos fotógrafos ): Esos Escarabajos, Vespas y biciclos de un mood de lustre; esos tacones, esas botas de caña y fiesta new wave (Chicas malas); esas ventanas con vidrieras, tigres de Bengala de Salgari o Kipling, latas de vigorizantes energéticos, abrazadas botellas de bebidas que reconfortan, llaves de paso del agua de mangueras, cajitas que traen charlots, manolas que se atavían para el astado en su paseíllo de lunares y de luces (su Octava “migueliana” [IV], “Torero”, para un Centenario que está siendo sin peritos ni lunas...); esos molinos que translucen la calma chicha de intrigante horizonte… y en las estancias el huso siempre listo para hilar los ropajes con los que se amanceba, en virginal esposorio de fascinación poppy que progresa a art narrativo a lo Kitaj/Don Eddy…, y sin despreciar una línea kitsch/ mex o un churrigueresco postmoderno.
De lo demás, de sus querencias e inclinaciones a la horda McNamara, de su nulo rubor por el efímero disparate… ésta, a quien los bienpensantes juzgarán de indecencia, es airosa proa de un hiper mamado en la cosmópolis del hedonismo en que los ángeles dormitan por Radio City Music Hall, y los “púrpuras” se despelotan tocados de boas rosas e imperdibles de escapularios, con mariposas y avalorios de decadencia…
De la mujer, la persona y la carne… ahí sus primeras criaturas sorollescas en unos niños aguardando un amanecer de sol y luz, de esperanza; sus espartanos de piel de la caoba; sus aladinos persas para el hermano que adora…
Nos hallamos ante una exitosa “hembra de marca”, con los mayores atavíos de artista en un proceso inacabado, imprevisto, que no precisa de otras bendiciones que las que ya lleva puestas… Porque carece de remilgos de factorys, modas o márketings; que lo mismo se lanza a un “pop art” tardío y sin fisuras que extralimita una acentuada carga sensual en renovados ramalazos sicodélicos con los que atiza, azuza y da esplendor a sus personales iconos, sus tiernas maldades, sin otras ataduras que sus imaginarios “luneros”/“barcaroleros”… Consciente, porque lo sabe, que, por volar imbatida, es víctima de su propio sino de luchadora solitaria; llanera de un fantasy art, sin otros avalorios que el disfrute por el desatado juego del vapuleo de las supersticiones ajenas… Sin mayores atributos o deudores que sus peculiares “fantasmas de Edimburgo”, un genial mosaico de criaturas envueltas en bombón de granadina y caramelo: The Elohe’s Dreams Collection!!... para rubor de los recluídos en su condición de tontos superiores..., que haberlos haylos.
(Manolo Ferreras, premio Hidalgo de Presencia Gitana y periodista “banderillero
Reseña del Grupo PINTA MI AMOR NO PARES
La chica de la “tira cómica” diaria, la reina mora del editorial demoledor a todo cuanto se menee… Azote de la vulgaridad con pose de Salomé, es una melancólica de tomo y lomo; llama purificadora e ilusa contra el aburrimiento, porque, pudiendo quemar más si cabe que todas las hogueras de los diablos, usa el retardo al deflagar… ¡Eso sí, le arden las botellas…, y son de cerveza…!
Descacharrante y certera: ¡perdiz que vuela, perdiz a la cazuela!
¡Albacete de l@s cien mil emergentes hij@s de la causa cool hispana!...
En un recóndito lugarín que apodan Golosalvo -nada lejos de la Fuentealbilla del pequeño “torpedo”- nació esta abogada de nombre Elohe “Poppy la Amazona” de pomos bien armados, erguida al cielo como una espiga de generoso grano en vara y media, de arte y lozanía. Esplendor de la Crocus amarga –el azafrán- deshojada con garbo, macerada como la tierra que pisa -calizas del Mioceno-, y sólo batida por las aspas de los molinos que ella elige, y exclusivamente en colinas de la misma altitud -700 m.- que su añorada Madrid…, adonde galopa y corta el viento (melena sic) en pro de otros esperpentos y “Líos” que enriquezcan su ya de por sí concepto del colmo… Humildemente: ¡¡ELOHE! (¡Viva Costus!)
… ¡Por sus obras la conocerás!: decires pintureros de adolescente zambullida en el ayer; adoratriz de un único becerro sin genero de dudas –el masculino-, mujer de agallas y llagas… A la lima y al limón, que sí tiene quien la quiera… ¡“Inenarreibol”!: Cipos, cuchillos, lunares, botes y capotes; vídrios, uñas, tatuajes, estigmas, mantillas y coronillas…
Del amor por lo primero… su militancia chic (“Tan importante como saber vivir es saber recordar”, como aseguran los buenos fotógrafos ): Esos Escarabajos, Vespas y biciclos de un mood de lustre; esos tacones, esas botas de caña y fiesta new wave (Chicas malas); esas ventanas con vidrieras, tigres de Bengala de Salgari o Kipling, latas de vigorizantes energéticos, abrazadas botellas de bebidas que reconfortan, llaves de paso del agua de mangueras, cajitas que traen charlots, manolas que se atavían para el astado en su paseíllo de lunares y de luces (su Octava “migueliana” [IV], “Torero”, para un Centenario que está siendo sin peritos ni lunas...); esos molinos que translucen la calma chicha de intrigante horizonte… y en las estancias el huso siempre listo para hilar los ropajes con los que se amanceba, en virginal esposorio de fascinación poppy que progresa a art narrativo a lo Kitaj/Don Eddy…, y sin despreciar una línea kitsch/ mex o un churrigueresco postmoderno.
De lo demás, de sus querencias e inclinaciones a la horda McNamara, de su nulo rubor por el efímero disparate… ésta, a quien los bienpensantes juzgarán de indecencia, es airosa proa de un hiper mamado en la cosmópolis del hedonismo en que los ángeles dormitan por Radio City Music Hall, y los “púrpuras” se despelotan tocados de boas rosas e imperdibles de escapularios, con mariposas y avalorios de decadencia…
De la mujer, la persona y la carne… ahí sus primeras criaturas sorollescas en unos niños aguardando un amanecer de sol y luz, de esperanza; sus espartanos de piel de la caoba; sus aladinos persas para el hermano que adora…
Nos hallamos ante una exitosa “hembra de marca”, con los mayores atavíos de artista en un proceso inacabado, imprevisto, que no precisa de otras bendiciones que las que ya lleva puestas… Porque carece de remilgos de factorys, modas o márketings; que lo mismo se lanza a un “pop art” tardío y sin fisuras que extralimita una acentuada carga sensual en renovados ramalazos sicodélicos con los que atiza, azuza y da esplendor a sus personales iconos, sus tiernas maldades, sin otras ataduras que sus imaginarios “luneros”/“barcaroleros”… Consciente, porque lo sabe, que, por volar imbatida, es víctima de su propio sino de luchadora solitaria; llanera de un fantasy art, sin otros avalorios que el disfrute por el desatado juego del vapuleo de las supersticiones ajenas… Sin mayores atributos o deudores que sus peculiares “fantasmas de Edimburgo”, un genial mosaico de criaturas envueltas en bombón de granadina y caramelo: The Elohe’s Dreams Collection!!... para rubor de los recluídos en su condición de tontos superiores..., que haberlos haylos.
(Manolo Ferreras, premio Hidalgo de Presencia Gitana y periodista “banderillero
6 comentarios:
Probando después de mil lios... ¡Coñazo de Google!!!!
.... ¡que la miro y enamora más, la jodía!!1 ¡Al Reina esta chica!!!!! jajajajaja
Si yo os contase el problemita que tengo con mi real blog, y por muchos años!!!!
Buenísima Elohe y toda su obra, y la presentación, no digo nada.
toi contigo Manolo...al Reina.
Un saludo Paqui...gracias.... por cierto he intentado seguirte en uno de tus blogs y no me ha dejado..luego lo vuelvo a intentar..:))
Lo mismo el de Zarcillo no puedes, ese es un colectivo al que pertenezco, lo arreglaré...
A mí pasaba lo mismo, que no podía dejar comentarios, ni siquiera en el mío hasta que me di cuenta de que tenía desactivados los cookies en mi navegador...
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